Con la intención de estrechar lazos comerciales y políticos que respalden a Irán frente a la “injusta” controversia que rodea a su programa nuclear, el presidente ultraconservador Mahmud Ahmadineyad inicia mañana, con una estadía de tres días en Brasil, la etapa sudamericana de una gira que lo llevará también a Bolivia y Venezuela. El mandatario llega al continente en el cierre de un serie de visitas en las que intentó acercar los conflictos, las enemistades y las oportunidades de negocios de Oriente Medio a la agenda regional. La llegada del líder iraní incomoda a sectores políticos tanto dentro como fuera de Brasil. El congresista norteamericano Eliot Engel, un demócrata proisraelí que defendió la invasión a Irak en 2003, advirtió a Luiz Inácio Lula da Silva que “comete un serio error” al recibir a Ahmadineyad.
Durante una escala previa en Gambia, Ahmadineyad dijo que esperaba obtener el apoyo de Brasil frente a las presiones de EE.UU. y de las potencias europeas para que detenga su programa nuclear. El presidente iraní reiteró que las investigaciones nucleares de su país tienen fines pacíficos y que las sospechas provienen de “unos pocos poderes arrogantes”.
Al inicio de una gira regional que incluirá a Venezuela y Bolivia, el líder chiita pedirá en Brasilia apoyo para enfrentar las “injustas presiones” que su plan nuclear recibe desde Occidente. La derecha brasileña se niega a recibirlo en el Congreso.
Manos unidas. Lula da Silva mantuvo una reunión bilateral con Ahmadineyad el 23 de septiembre pasado, en el marco de la 64ª Asamblea General de la ONU en Nueva York.
Durante una escala previa en Gambia, Ahmadineyad dijo que esperaba obtener el apoyo de Brasil frente a las presiones de EE.UU. y de las potencias europeas para que detenga su programa nuclear. El presidente iraní reiteró que las investigaciones nucleares de su país tienen fines pacíficos y que las sospechas provienen de “unos pocos poderes arrogantes”.
“Brasil ya enfrentó presiones similares”, recordó el iraní, cuyo gobierno sorprendió a Occidente tres años atrás por los avances logrados en el marco de un programa secreto de enriquecimiento de uranio. Irán sostiene que intenta fabricar combustible para sus centrales eléctricas, pero EE.UU. e Israel lo acusan de generar material suficiente para armar bombas atómicas.
Si Irán y Brasil tienen roles “merecidos” en un sistema multipolar, Ahmadineyad considera que la alianza no sólo debe ser política. De hecho, unas 150 de las 280 personas que integran su comitiva son empresarios.
La agenda del iraní en Brasilia incluye una reunión con Lula da Silva, días después de que recibiera al presidente palestino Mahmud Abbas. El líder de la ANP le pidió que gestione el fin del apoyo de Teherán al partido radical Hamás, que tiene el control de la Franja de Gaza, como manera de ayudar al proceso de paz palestino-israelí.
Ahmadineyad también visitará al Congreso brasileño, aunque no está confirmado que vaya a dar un discurso debido al rechazo de los partidos opositores a Lula. El conservador demócrata pidió al presidente del Congreso, José Sarney, que “no reciba” a Ahmadineyad.
El gobernante sí hablará, en cambio, en una universidad privada de Brasilia, donde incluso contestará preguntas relacionadas con su polémica negación del Holocausto judío.
Pese a que el congresista Engel señaló que “este tipo de reuniones no son la vía para que Brasil se convierta en un líder mundial”, la visita de Ahmadineyad otorga a Lula da Silva una nueva oportunidad para afianzarse como mediador en asuntos globales.
Además de Abbás, el presidente israelí Shimon Peres colocó días atrás a Lula en un lugar de virtual intermediario al pedirle que convenza a Irán de que no debe dotarse de armas nucleares.
Lula acumula: -Aposentadoria por invalidez,aposentadoria de Aposentadoria por invalidez, Pensão Vitalícia de "perseguido político" isenta de IR, salário de presidente de honra do PT, salário de Presidente da República. Você sabia??? Sphere: Related Content