La Corte Suprema de Brasil dictaminó que Sean Goldman debe volver con su padre biológico a Estados Unidos.
Con este fallo, el presidente del tribunal, Gilmar Mendes, anuló la medida provisional que se había emitido el jueves pasado para mantener al niño en Brasil.
La decisión de Mendes aún necesita de la aprobación de sus colegas de la corte, pero al ser vinculante, David Goldman puede llevarse a su hijo de regreso a EE.UU. inmediatamente.
"La decisión, aunque es preliminar, es de carácter inmediato, y la duda principal que existe en este momento es si la familia brasileña del menor recibiría un nuevo plazo de 48 horas para la entrega de Sean o si debería concretarla ya en el consulado estadounidense en Río de Janeiro", informó la corresponsal de BBC Mundo en el Cono Sur, Valeria Perasso.
David Goldman se mostró feliz al conocer la decisión judicial, aunque reclamó porque "no puede ser tan difícil" conseguir que se haga justicia y expresó que ansiaba pasar la Navidad su hijo.
Sin embargo, la familia brasileña de Sean anunció que apelará el fallo de Mendes
"El abogado Sergio Tostes, quien representa a la abuela materna, afirmó que desde Brasil se había invitado al padre biológico del menor a pasar las fiestas de fin de año en el país sudamericano, como un primer paso para un entendimiento en la disputa por la custodia del niño", agregó Perasso.
Según la corresponsal de BBC Mundo, la defensa de la familia materna anticipó a la prensa local que examinará en detalle la decisión y tomará "todas las medidas legales que correspondan".
Un caso complicado
Mendes determinó la entrega del menor a los cuidados de su padre, David Goldman, que debe regresar a los Estados Unidos
Comunicado del Supremo Tribunal Federal de Brasil.
Goldman ha luchado por obtener la custodia de su hijo desde 2004, cuando el menor fue llevado a Brasil por su esposa, quien falleció el año pasado.
En ese entonces, la madre del pequeño, la brasileña Bruna Bianchi, viajó con su hijo asegurando que serían unas vacaciones, pero nunca volvió. En Brasil consiguió que se le aprobara el divorcio y contrajo nupcias nuevamente.
Al morir Bianchi, la custodia provisional fue concedida al padrastro del niño.
El caso ganó notoriedad luego de que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, intercedió por el padre ante el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, en marzo pasado.
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