Chávez: "huele a azufre'' en Copenhague

COPENHAGUE (AOL Noticias y Servicios Combinados).- El presidente Hugo Chávez criticó el viernes duramente a su par estadounidense, Barack Obama, al que acusó de preparar un proyecto de acuerdo climático "a espaldas" a la mayoría, y afirmó que tras su paso por la tribuna de Copenhague "huele azufre".

El gobernante en un discurso en Copenhague, en la conferencia climática, difundido por la estatal Venezolana de Televisión (VTV), dijo que "los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) impugnamos desde ya cualquier documento que saque Obama por debajo de la puerta".

"Obama habló y salió por la puertita esa, por la puerta de atrás. Es el imperio que llega a medianoche y en la oscuridad, a espaldas de la mayoría y de manera antidemocrática, pretende cocinar un documento", dijo el mandatario al denunciar que su par estadounidense estaría preparando de forma secreta un acuerdo climático que favorece a los países desarrollados.

"Llamamos a los pueblos del mundo a que nos unamos a denunciar las pretensiones imperiales, y a señalar las causas de los daños ambientales: el capitalismo, y el principal culpable que es Estados Unidos y su presidente, el premio Nobel de la Guerra", expresó el gobernante.



En respuesta a la afirmación que realizó este viernes Obama de que es necesario actuar para combatir el cambio climático, Chávez dijo que "el Premio Nobel de la Guerra acaba de decir aquí que él vino fue actuar. Bueno, demuéstrelo, señor, no se vaya por la puerta de atrás. Haga todo lo que tiene que hacer para que Estados Unidos se adhiera al protocolo de Kyoto y vamos a respetar Kyoto".

"Huele azufre aquí, huele azufre, sigue oliendo a azufre en este mundo", comentó el mandatario al referirse a la participación de Obama en la cumbre.

Chávez realizó en el 2006 un polémico comentario en Naciones Unidas cuando expresó que la tribuna de la organización olía a azufre tras el paso del entonces presidente estadounidense George Bush, a quien comparó con el "diablo".

"Obama quedará para la historia como una gran frustración para los estadounidenses que creyeron en él", comentó Chávez al expresar su desilusión por el gobernante estadounidense con quien sostuvo dos breves contactos en abril pasado en la Cumbre de las Américas que se realizó en Trinidad y Tobago.

El gobierno de Chávez restableció a mediados de año las relaciones con Estados Unidos, tras el encuentro con Obama, y autorizó en junio pasado el reenvío a Washington del embajador venezolano, Bernardo Alvarez, quien fue retirado en represalia por la decisión que tomó Venezuela de expulsar al diplomático estadounidense, Patrick Duddy.

Venezuela ordenó en septiembre del año pasado el retiro de Duddy en solidaridad con una decisión similar que adoptó el gobernante boliviano, Evo Morales, que acusó a Estados Unidos de intervenir en los asuntos internos de su país.

Duddy volvió a su cargo en Caracas en junio pasado.

Chávez ha ido progresivamente endureciendo su discurso hacia la administración estadounidense desde mediados de año luego que Washington y Bogotá acordaron un convenio militar que permite a tropas estadounidenses utilizar bases colombianas.

El mandatario ha rechazado el acuerdo alegando que Estados Unidos estaría preparando un acto de agresión contra Venezuela, alegación que ha sido rechazada por el Departamento de Estado.


Chávez fustiga a Obama y países ricos

Mientras la policía danesa sacó por la fuerza a cientos de manifestantes que intentaban ingresar al recinto de la Cumbre sobre Cambio Climático, el presidente venezolano Hugo Chávez fustigó al mandatario estadounidense Barack Obama y a los países desarrollados por la contaminación ambiental en el mundo.

Cientos de activistas enfurecidos se manifestaron en Copenhague ante la falta de progreso que han mostrado hasta el momento las negociaciones y también por las restricciones que se les impusieron para ingresar a las salas donde tienen lugar las conversaciones.


Pero las críticas hacia el desarrollo de la cumbre no sólo provinieron de los manifestantes. "Lo que vivimos en este planeta es una dictadura imperial, y desde aquí la seguimos denunciando: ¡Abajo la dictadura imperial!", dijo Chávez al referirse a Estados Unidos, según un comunicado distribuido por la presidencia venezolana.

En su intervención en la XV Cumbre sobre el Cambio Climático que tiene lugar en Copenhague, el mandatario agregó que "las naciones más poderosas del planeta" han tenido una "actitud irresponsable" y una "falta de voluntad política" para reducir las emisiones de gases contaminantes.



"Hay algunos países que están jugando a que aquí no haya documento, porque precisamente no quieren una ley, no quieren una norma, porque la inexistencia de esa norma les permite jugar su libertad explotadora, su libertad arrolladora", agregó Chávez, según el comunicado.

Asimismo, Chávez responsabilizó a los países ricos de la contaminación, y señaló que "los ricos están destruyendo el planeta. ¿Será que piensan irse para otro cuando destruyan éste?"

Por otra parte, Chávez criticó la concesión del premio Nobel de la Paz a Obama y agregó que lo recibió "casi el mismo día que mandaba 30.000 soldados más a matar inocentes en Afganistán".

Cientos de manifestantes marcharon sobre el centro de convenciones, donde la policía antimotines formó cordones protectores. Algunos manifestantes dijeron que querían transformar la conferencia global en una "asamblea popular" y al acercarse a las filas policiales éstas los rechazaron con gases picantes.

La televisión mostró a un hombre cuando lo arrojaban del techo de una camioneta policial y un agente lo golpeaba con su bastón.

Las manifestaciones multitudinarias en la capital danesa el fin de semana pasado revelaron una conciencia mundial creciente sobre el peligro que representa el aumento de las temperaturas. Los científicos dicen que el calentamiento global provocará la extinción de especies, la inundación de zonas costeras, grandes tormentas, sequías y epidemias.

Las conversaciones de Copenhague se han caracterizado hasta el presente por las discrepancias entre Beijing y Washington, así como entre países ricos y pobres

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