JERUSALÉN (AFP) - Cuarenta y cinco de los 686 pasajeros detenidos que estaban a bordo de una flotilla humanitaria internacional que fue asaltada por comandos israelíes, estaban a punto de ser expulsados este martes, indicó un responsable del ministerio del Interior israelí.
"Un total de 686 pasajeros estaban a bordo de los barcos interceptados y, de ese efectivo, 45 están en vías de expulsión", afirmó a la radio militar Yossi Edelstein, un alto funcionario del ministerio del Interior.
"Una parte de esos detenidos rechazó identificarse. Protestaron echándose al suelo, manteniendo una actitud provocadora", lamentó el responsable. "Los que aceptaron ser expulsados sin problema fueron conducidos al aeropuerto Ben Gurion" de Tel Aviv, prosiguió Edelstein.
Según este último, entre los pasajeros figuran ciudadanos "de Malasia, Indonesia, Marruecos, Argelia, Pakistán, Kosovo, Yemen y numerosos turcos". La mayoría de los países citados no tiene relaciones diplomáticas con Israel, con excepción de Turquía.
El alto funcionario no precisó la nacionalidad o la identidad de al menos nueve pasajeros muertos durante el ataque.
Por su parte, la radio militar indicó que los pasajeros eran originarios de 38 países y que iban a ser expulsados en las próximas 72 horas, después de haber sido interrogados por un juez.
La radio también indicó que 480 pasajeros estaban detenidos en una prisión al sur de Israel y que los demás estaban siendo trasladados del puerto de Ashdod, adonde fueron llevados los barcos de la flotilla, hacia la prisión.
La policía estaba en alerta ante la prisión en Beersheva, para impedir toda manifestación.
Por otra parte, 45 pasajeros, en su mayoría turcos, seguían hospitalizados, lo mismo que siete soldados, según la radio israelí.
Entre los detenidos figura Katab Jatib, presidente de la más importante organización de árabes israelíes, que llamó a una jornada de huelga y a manifestaciones en Israel.
Por su parte, el viceministro de Defensa, Matan Vilnaï, advirtió este martes de que Israel impedirá a todo otro barco con ayuda humanitaria internacional entrar en las aguas de la Franja de Gaza. "No permitiremos a los barcos llegar a Gaza y abastecer lo que se ha convertido en una base terrorista que amenaza el corazón de Israel", declaró Vilnai a la radio pública.
Los responsables de la 'Flotilla de la libertad' que organizaron el convoy humanitario internacional tomado al abordaje por comandos de la marina israelí, anunciaron que otros dos navíos seguían la ruta. Una de la organizadoras, Greta Berlin precisó sin embargo que la próxima tentativa de romper el bloqueo israelí de la Franja no tendría lugar antes de varios días. "El (mercante) 'Rachel Corrie' se encuentra actualmente frente a las costas de Italia y el otro barco está en reparación", precisó a la AFP.