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- La puesta al día afecta a toda la gama: Mini, Mini Cabrio y Mini Clubman
- Entre los cambios, sobresale un nuevo motor diésel desarrollado por BMW
- Las modificaciones también afectan al exterior, interiores y equipamiento
- Su precio será un 2% más caro respecto a las versiones actuales
El grupo BMW pondrá a la venta el próximo 18 de septiembre el Mini más alemán desarrollado en los más de 50 años de historia de este modelo. Nos explicamos...
De todos es sabido que este modelo tiene un origen británico. Y todos conocemos, también, que la marca Mini fue posteriormente germanizada, tras ser relanzada en 2001 por BMW.
Sin embargo y a pesar de contar con BMW, Mini se veía obligada a realizar acuerdos con otras compañías para el desarrollo de motores. En concreto hablamos de Toyota, firma que acordó con BMW suministrar el motor de gasóleo 1.4 de 75 caballos, que impulsó a la primera generación del Mini One D.
De esta manera, el primer Mini bajo el paraguas de BMW mezclaba sus orígenes británicos -continúa fabricándose en Oxford (Reino Unido)- con su nueva nacionalidad germana y con la incursión de elementos japoneses como era el motor diésel.
En 2006, con la llegada de la segunda generación del Mini, BMW cambiaba el acuerdo con Toyota por otro similar con PSA -Peugeot-Citroën- para el suministro de motores diésel. De esta manera, el Mini One D pasaba a tener 90 caballos y nacía el Cooper D con 110 caballos, ambos con un propulsor de 1,6 litros.
No obstante, a partir del mes de septiembre de este año será más alemán que nunca, puesto que para entonces ya no existirán en el mercado los Mini con motores desarrollados por PSA. Para entonces, todos los vehículos de gasóleo que se comercialicen en el mercado -Mini, Mini Cabrio, Mini Clubman y Mini Countryman- incorporarán un motor desarrollado por BMW.
Este nuevo propulsor de gasóleo de BMW, con 1,6 litros de cilindrada y dos niveles de potencia 90 y 110 caballos, es el principal cambio de la puesta al día de la gama Mini, que también afecta al Cabrio y al Clubman.
Esta actualización de la gama, que llegará a los concesionarios en el mes de septiembre, supondrá un incremento de alrededor de un 2% sobre el precio actual. Junto al nuevo motor diésel, la puesta al día incluye retoques estéticos en el exterior y en el interior, un mayor equipamiento y unos motores de gasolina más eficientes.
Nuevo motor diésel
Como decíamos anteriormente, el principal cambio de la gama Mini que afecta tanto al Mini como al Clubman y al Cabrio es la sustitución del anterior motor de origen PSA -Peugeot-Citroën- por otro de BMW. A pesar de que la cilindrada se mantiene -1,6 litros- y los niveles de potencia tampoco cambian -90 y 110 caballos-, el propulsor es de nuevo desarrollo.
Según los responsables de BMW, este nuevo motor diésel de Mini es más progresivo y silencioso, que el anterior de PSA, presenta una alimentación por turbo más eficiente y también logra mejorar los consumos y las emisiones.
En concreto, el nuevo propulsor presenta una cilindrada de 1.598 centímetros cúbicos y tiene dos niveles de potencia: 90 y 110 caballos. La potencia máxima se consigue a 4.000 revoluciones y el par es de 215 Nm. y de 270 Nm. respectivamente, entre las 1.750 y las 2.500 revoluciones. Respecto a los consumos, el Mini One D presenta ahora un gasto de combustible de 3,8 litros y unas emisiones de 99 gramos, cifras que también se repiten en el Cooper D.
En la siguiente tabla se muestra las diferencias entre el Mini One D con el motor anterior de PSA y el actual de BMW:
| Mini One D ( PSA) | Mini One D (BMW) |
Cilindrada | 1.560 | 1.598 |
Diámetro x carrera | 75 x 88,3 | 78 x 83,6 |
Potencia | 90 CV a 4.000 rpm | 90 CV a 4.000 rpm |
Par máximo | 215 Nm. a 1.750 rpm | 215 Nm. a 1.750 rpm |
Compresión | 18:1 | 16,5:1 |
Velocidad | 182 | 184 |
Aceleración 0-100 | 11,5 | 11,4 |
Consumo medio | 3,9 litros | 3,8 litros |
Emisiones | 104 gramos | 99 gramos |
Y en esta otra table comparamos el Cooper D con el motor PSA y el motor BMW:
| Mini Cooper D ( PSA) | Mini Cooper D (BMW) |
Cilindrada | 1.560 | 1.598 |
Diámetro x carrera | 75 x 88,3 | 78 x 83,6 |
Potencia | 110 CV a 4.000 rpm | 112 CV a 4.000 rpm |
Par máximo | 240 Nm. a 1.750 rpm | 270 Nm. a 1.750 rpm |
Compresión | 18:1 | 16,5:1 |
Velocidad | 195 | 197 |
Aceleración 0-100 | 9,9 | 9,7 |
Consumo medio | 3,9 litros | 3,8 litros |
Emisiones | 104 gramos | 99 gramos |
Respecto a los motores de gasolina los cambios son menos significativos. De hecho, los propulsores -de origen BMW- se mantienen intactos. Tan sólo han sido ligeramente revisados para reducir ligeramente el consumo y las emisiones.
Comenzando por el Mini One, la firma de BMW mantiene el motor de 75 caballos aunque ahora ofrece 20 Nm más de par hasta llegar a a la cifra de 140 Nm. a 2.250 revoluciones. Con esta puesta al día el Mini One presenta un consumo de 5,4 litros (+0,1 litros) y unas emisiones de 127 gramos de CO2 (-1 gramo de CO2).
Por otra parte el siguiente Mini One pasa ahora a tener 98 caballos (3 más) y un par de 153 Nm a 3.000 revoluciones, lo que supone un incremento de 13 Nm. Por su parte este Mini One acelera 0,4 segundos más rápido de 0 a 100 kilómetros por hora y logra 1 kilómetro más de velocidad máxima. El consumo aumenta ligeramente hasta los 5,4 litros (+ 0,1 litros) y las emisiones bajan en un gramo hasta los 127 gramos de CO2.
Respecto al Mini Cooper, ahora logra 2 caballos más de potencia para situarse en los 122 caballos a 6.000 revoluciones. El par se mantiene en los 160 Nm. a 4.250 revoluciones y lo mismo ocurre con la aceleración de 0 a 100 km/h (9,1 segundos), la velocidad máxima (203 kilómetros por hora) y el consumo medio (5,4 litros). Las emisiones son ahora de 127 gramos de CO2 por kilómetro recorrido, lo que supone un descenso de dos gramos.
Por su parte el Mini Cooper S tiene 9 caballos más de potencia (184 CV) que se logran a 5.500 revoluciones. El par se mantiene en 260 Nm. entre las 1.600 y las 5.000 revoluciones. Con este incremento de potencia se ha mejorado en 0,1 segundos la aceleración, se han logrado 3 kilómetros más de velocidad máxima y el consumo y las emisiones se han reducido en 0,4 litros y en 13 gramos de CO2.
Por último, el John Cooper Works, que cierra la lista de los Mini de gasolina no presenta cambio alguno.
Retoques en el diseño
Respecto al aspecto del vehículo, tan sólo los entusiastas de la marca Mini podrán apreciar los cambios. Y es que las modificaciones realizadas son mínimas. Del frontal destacan por ejemplo la nueva rejilla del frontal, un paragolpes de nueva geometría, retoques en los bordes de los faros antiniebla y entradas adicionales de aire en las versiones más potentes.
Respecto a la zaga, lo más llamativos son las luces LED introducidas en los grupos ópticos, un paragolpes rediseñado y unas luces de marcha atrás y antiniebla trasero también con una nueva estética.
En el interior se han terminado en negro numerosos elementos como los mandos del volante, los del equipo de audio y los de la climatización. Además se ha incluido un anillo cromado en el volante y se ha actualizado la gama de tapizados para que el usuario pueda realizar una personalización más cercana a sus gustos.
Cierran la lista de innovaciones los nuevos colores en la gama, las nuevas variantes en la gama de llantas y un mayor número de opcionales como los faros con luz autoadaptable en las curvas o el sistema Mini Connected, que permite adaptar el iPhone al vehículo y, por medio de una conexión de datos, tener acceso a la radio por internet, acceso a búsquedas locales por medio de Google, así como seguir redes sociales como Facebook o Twitter.
Un éxito llamado Mini
Desde que BMW lanzara la nueva generación de Mini en 2001 y hasta el 30 de junio de 2010, la firma alemana ha comercializado un total de 1,7 millones de unidades del Mini. Esta cifra se divide prácticamente a partes iguales entre las dos generaciones.
En concreto, entre julio de 2001 y mediados de 2006 Mini comercializó un total de 870.000 unidades de la primera generación del Mini. Asimismo, entre finales de 2006 y junio de 2010 Mini ha vendido 830.000 unidades de la segunda generación. Por lo tanto, las cifras de ventas de una generación y otra son muy similares.
No obstante, si tenemos en cuenta que Mini ha iniciado recientemente la comercialización del Countryman y que no será hasta 2012 cuando llegue la tercera generación, todo indica a que la segunda generación será bastante más vendida que la primera.
A continuación se detallan las ventas de Mini, desde que BMW tomara las riendas de la marca:
Primera generación
2001 (desde julio) 24.965 unidades
2002 144.119 unidades
2003 176.465 unidades
2004 184.357 unidades
2005 200.428 unidades
2006 (Hasta el tercer trimestre) 140.000 unidades
Segunda generación
2006 (Último trimestre) 48.077 unidades
2007 222.875 unidades
2008 232.425 unidades
2009 216.538 unidades
2010 (hasta junio) 109.301 unidades
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