El jardín de las maravillas
11/05/2010
Motivos geométricos, estilo Art Decó, años 80, época bizantina... en joyería casi cualquier estética o corriente es susceptible de ser adaptada al medio y convertirse en sortijas, gargantillas o pulseras gracias a la técnica de esculpir las piezas y al uso de las más genuinas gemas y piedras preciosas.
Pero la llegada de la primavera impone un nuevo modelo creativo mucho más fresco y apetecible: las flores. Las colecciones de las firmas de joyería se convierten en lujosos jardines compuestos de la más variada flora, que queda inmortalizada en forma de esmaltes o piedras con una alta opacidad, como el coral o las perlas.
Dior Joaillerie mantiene la naturaleza como temática fetiche en casi todas sus líneas, Cartier cuaja sus deliciosas piezas florales de diminutos insectos, De Grisogono emplea distintas piedras para tratar de repetir los infinitos matices de los pétalos... Nadie quiere dejar pasar la oportunidad de hacer suyo este despertar natural y fresco.