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El escándalo en el Gobierno de Lula amenaza con aplazar la victoria de Dilma
Dilma Rousseff, durante un acto de campaña en Río de Janeiro. | AP
Las esperanzas de la oposición brasileña de forzar una segunda vuelta en las elecciones presidenciales aún están vivas. Dilma Rousseff, la preferida de Luiz Inácio Lula da Silva, cayó este miércoles por debajo del 50% por primera vez desde finales de agosto y vio reducirse su ventaja respecto a José Serra. Sin embargo, la nueva diferencia -21 puntos- sigue pareciendo casi insalvable a sólo una semana y media de la cita con las urnas.
La candidata del Partido de los Trabajadores (PT) perdió terreno en la última semana a raíz del escándalo de tráfico de influencias que el pasado jueves le costó el puesto a Erenice Guerra, su sucesora como ministra de la Casa Civil.
Según el instituto Datafolha, Dilma figura ahora con el 49% de las intenciones de voto frente al 51% de la encuesta realizada siete días antes. Por el contrario, Serra, ex gobernador de São Paulo y representante del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), ascendió hasta el 28% desde el 27% anterior.
También creció Marina Silva, ex ministra de Lula y ahora aspirante presidencial por el Partido Verde (PV), quien alcanzó un 13% después de haber permanecido estancada durante toda la campaña entre el 9% y el 11%.
¿Segunda ronda?
Para ganar en la primera vuelta del próximo 3 de octubre, cualquier candidato necesita llegar al menos hasta la barrera del 50%.
Si se tienen en cuenta sólo los votos válidos previstos en el sondeo de Datafolha -dejando aparte los blancos y nulos-, Dilma acumula el 54% de las intenciones de voto frente al 31% de Serra y el 14% de Marina. Sigue en pie, por tanto, la posibilidad de que la favorita de Lula se convierta en presidenta sin necesidad de acudir a una segunda votación cuatro semanas después.
En caso de que los brasileños tuvieran que volver a las urnas el 31 de octubre, la virtual sucesora de Lula recibiría el 55% de los sufragios, según Datafolha. Su probable rival en ese segundo turno, Serra, se quedaría en un 38%. La diferencia se ha recortado en cinco puntos respecto a la semana pasada, cuando el escenario previsto era de 57% para la ex ministra contra el 35% de su adversario.
Mientras tanto, Dilma conserva todavía un 51% en el seguimiento diario del instituto Vox Populi, si bien en dos días ha perdido dos puntos que se han repartido entre Serra (24%) y Marina (10%).
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