"Hugo Chávez se corrompió y terminó traicionando al pueblo"

"Tenemos que hacerle entender a los pobres que Hugo Chávez los traicionó, que prefirió a Evo, a Ortega, a Fidel"

Amigo de las metáforas, a Julio Borges, coordinador nacional del partido Primero Justicia, la velocidad vertiginosa con la que suceden en el país los acontecimientos políticos -y su impacto en la vida cotidiana de los venezolanos- le parece que es "como si a uno lo pusieran a beber agua metiéndole una manguera. Eso no se puede digerir", dice con preocupación.

Se inclina por hablarle a los venezolanos con absoluta franqueza: 2010 será un año de oportunidades para la alianza de oposición, pero también lleno de obstáculos, y en la medida en que mayores opciones de victoria se perfilen para el sector en el que milita, mayor será la arremetida represiva y violenta del gobierno de Hugo Chávez.

"Necesitamos disciplina para superar los obstáculos. Este no es el momento de la dirigencia política sino del país entero. La tarea no es sólo votar en septiembre (en las elecciones parlamentarias) sino que el país se active para crear una gran ola de cambios. Yo quiero decirle a los venezolanos: 'el cambio no es posible sin ti'. Tienen que participar en la comunidad, en ONG, militar en partidos políticos, meterse en la sociedad de padres y representantes, meterse en la piscina de lo público, marchar, protestar, alzar la voz. Todos debemos estar en 2010 con una sobrecarga de actuación".

Entre las muchas preocupaciones que Borges desgrana durante la conversación está su interés por cambiar un hecho para él incontrovertible: "Todos estamos metidos en la narrativa que Chávez creó. Al final no hablamos español sino 'chavismo' en nuestros referentes. Las categorías históricas, el lenguaje, las etiquetas, todo lo ha creado Chávez y estamos obligados a romper con eso, tenemos que reexplicar o volver a contar el cuento que Chávez ha contado a su manera. Si no lo hacemos seguiremos siendo los actores de reparto en un guión que él está escribiendo".

El inicio del nuevo año y la proximidad del compromiso constitucional que tiene el Presidente de comparecer ante la Asamblea Nacional a mediados de enero le parecen a Borges propicios para insistir en su denuncia sobre los "regalos" que Chávez hace a otros países -no sólo de Latinoamérica- y que representan en términos aproximados, según la investigación realizada por Primero Justicia, algo más de 53 mil 135 millones de dólares entre 2005 y el cierre del año 2009.

"Eso suma cerca de 250 regalos a 38 países distintos y los más beneficiados en orden decreciente han sido Cuba, Argentina, Nicaragua y Ecuador. El Gobierno quiere encuadrar esos regalos en un mensaje humanitario, pero ningún padre de familia sería tan loco como para regalarle la comida a sus vecinos mientras sus propios hijos se mueren de hambre. Nosotros tenemos que poder hacerle entender a los pobres de Venezuela que Hugo Chávez los traicionó, que prefirió a Evo (Morales), a (Daniel) Ortega, a Fidel (Castro). Decirles: Prefirió a otro antes que a ti".

Borges insiste en desmentir la versión oficial según la cual si la oposición llegara a tener mayoría en el Parlamento eliminará las misiones o, peor aún, habrá guerra. Muy por el contrario, el dirigente de PJ dice que su propósito es obligar al Gobierno a "que el dinero que nos corresponde por el petróleo se invierta acá".

"Nosotros queremos ir a la Asamblea Nacional y ponerle una 'ley candado' a Chávez y prohibir que regale el dinero. Ahora tenemos una gran oportunidad, el país ha despertado ante la ineficiencia, la corrupción del Gobierno, y si nosotros (la alianza de oposición) volvemos a la AN podremos poner en la agenda el tema y que seamos los defensores de los intereses de la gente ante un Presidente que está regalando todos los recursos, porque Chávez ya no es el presidente de Venezuela sino el presidente de eso que llaman revolución. Chávez se corrompió con tanto poder y terminó traicionando a su pueblo".


Policías, casas y electricidad

Julio Borges muestra los cuadros y tablas donde se resume la labor de investigación sobre las dádivas que Chávez otorga a países cuyos gobiernos le son afines políticamente. Admite que no ha sido posible hacer el seguimiento a todos y determinar si, como ocurre en Venezuela, Chávez también deja en el exterior promesas incumplidas.

Pero lo que sí tiene muy claro Borges es que con el dinero que Chávez ha regalado en diez años -que él califica como una cifra brutal- "se hubiera podido contratar el déficit de policías (unos 40 mil), entrenarlos, triplicarles el sueldo y pagarles a 120 mil policías durante 30 años consecutivos".

También habría servido la totalidad del dinero para construir dos millones de viviendas, siendo que el déficit acumulado a escala nacional es de 1,6 casas o para haber pavimentado los 98 mil kilómetros de vías existentes y construir 4 mil kilómetros adicionales de autopistas.

Pero con fracciones de ese monto de más de 53 mil millones de dólares se habrían podido construir cinco mil escuelas (con el 10%), construir un CDI en cada uno de los municipios del país (con 12%) y un ambulatorio tipo II para atender a cien mil personas o un polideportivo (con 3%) en cada una de las parroquias.

"Hay que hacerle comprender al país que el tema de los regalos tiene que ser central en nuestro trato con el Gobierno y que a Chávez hay que medirlo a través de todo el dinero que él, deliberadamente, ha decidido regalar al exterior. A Chávez hay que quitarle esa careta de 'yo no fui'. Él deliberadamente decidió no ayudar a los venezolanos. Y ahí está el problema eléctrico: Chávez prefirió electrificar La Habana, La Paz o Managua".

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