La gasolinera del futuro

Miércoles, 13 de mayo de 2009

LA PRIMERA, EN JAPÓN
Su próxima electrolinera, a 12.500 kilómetros

Que tiemblen las gasolineras con sus mangueras a chorro y sus surtidores metiendo prisa para pasar por caja! Llegan las electrolineras. La primera estará lejos, en Japón, a más de 12.000 kilómetros de distancia. Pero se espera que en los próximos tres años vayan quedando más y más cerca hasta situarse en las mayores capitales y puntos estratégicos de las carreteras españolas.

CÉSAR URRUTIA
MADRID.-La ciudad de Yokohama ha inaugurado hace apenas unas horas la primera electrolinera, un prototipo con el que espera ofrecer el servicio de cambio automático de baterías a la pequeña pero creciente flota de coches eléctricos de la ciudad.

El sistema ha sido desarrollado por el ayuntamiento de la capital japonesa y la empresa californiana Better Place, que se ha propuesto extender el uso del coche eléctrico hasta convertirlo en una alternativa real al convencional.

"Fabricar el coche eléctrico es sólo una parte del proceso de independizarse del petróleo", explica en conversación telefónica el presidente de Better Place, Shai Agassi "Es igual de importante crear una infraestructura de abastecimiento que ofrezca a los clientes la misma seguridad y confianza que le da actualmente la red de gasolineras para moverse donde quiera pero con energía limpia".

Agassi, un gurú del coche eléctrico que habla con soltura el castellano y tiene en Barcelona una de sus ciudades preferidas, cree que España es uno de los países en mejores condiciones para implantar el uso de este vehículo.

La inauguración de la primera electrolinera es un hito en la historia del automóvil, según el fundador de Better Place. En menos de dos minutos todo el proceso de cambio de baterías es completado y el conductor no tiene ni siquiera que bajarse del vehículo.

Una cadena automatizada utiliza dos plataformas para llevar a cabo el proceso. La primera extrae la batería vacía de la parte inferior del vehículo y, una vez retirada, la segunda instala una cargada procedente del almacén de la estación de servicio.

Mientras el cliente prosigue su viaje conociendo en todo momento cual es la autonomía del vehículo, la estación conecta a la red la batería descargada para volverla a llenar de electricidad y ponerla a disposición del próximo cliente. En ningún momento hay flujo de corriente eléctrica hacia el coche.

Las electrolineras pretenden completar las necesidades de abastecimiento de los coches eléctricos para distancias largas. Aunque se evoluciona a marchas forzadas, a falta de un año para que comiencen a comercializarse los primeros coches enchufables, la autonomía de las baterías apenas llega a los 100 kilómetros.

En el uso diario en la ciudad, la mayoría de estos coches recargarán sus pilas enchufándose a la red eléctrica convencional durante la noche en los garajes o en postes de abastecimiento situados en la calle. Pero para un viaje extraordinariamente largo, deberán asegurarse el repostaje en una de estas estaciones de servicio que, a juzgar por el prototipo, serán inmaculadas y limpias como un quirófano, todo lo contrario a una gasolinera convencional en un Puente de Mayo.

La idea de Better Place es que toda la infraestructura necesaria para el funcionamiento de una estación de cambio automático de baterías se instale bajo tierra, dejando la superficie únicamente para el acceso de los vehículos. La estación almacenaría alrededor de 12 baterías y necesitaría contar con una potente conexión eléctrica a la red, de manera que pudiera cargar este stock en el plazo de una hora.

California, en Estados Unidos, Israel y Dinamarca serán los siguientes lugares donde se instalarán estas estaciones de servicio. Con el plan del Ministerio de Industria de tener un millón de coches híbridos y eléctricos en la carretera para 2014 y una fábrica como la de Renault en Valladolid que a finales de año podría recibir el encargo de producir uno de estos vehículos, España se convertiría en uno de los países con mayor necesidad de contar con una infraestructura de abastecimiento.

La red de estaciones debería contar con una cifra cercana a 200 estaciones en todo el país, según Agassi y la empresa ya está en contacto con distintas empresas y administraciones autonómicas para desarrollarla. Diáfanas, limpias, silenciosas… las electrolineras prometen cambiar muchas cosas en la carretera. ¿Llegaremos a echar de menos el olor a gasolina y el cubo de agua sucia para limpiar el parabrisas?

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