Lula congela los proyectos viales que tiene con Correa

El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, reaccionó ayer ante la expulsión de la empresa Odebrecht de Ecuador y ordenó congelar por tiempo indeterminado los proyectos de infraestructura que Brasil discute con el Gobierno de Rafael Correa.

La decisión del Ejecutivo de Lula ha sido "la respuesta más contundente" que Brasil ha tomado desde que comenzaron los problemas de la constructora en esa nación andina a raíz de un alegado incumplimiento de contrato, según fuentes oficiales.

La suspensión de los proyectos viales entre Brasil y Ecuador fue comunicada mediante una nota de la cancillería, difundida después de que, este miércoles, el Gobierno de Correa ratificara que Odebrecht no podrá permanecer en ese país. Según el comunicado, Lula ordenó que el embajador de Brasil en Quito "entre en contacto con la cancillería ecuatoriana" para informarle sobre la decisión.

La nota oficial del Ejecutivo brasileño expresa que "en función de los desdoblamientos que envuelven a empresas brasileñas en ese país", Brasil postergó sine die la ida a Ecuador de una misión encabezada por el ministro de Transportes, programada para el próximo día 15. La misión debía "discutir temas vinculados al apoyo brasileño a obras de infraestructura vial" en esa nación que, en la práctica, quedan ahora congeladas.

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