Todo empezó por una botella de vino y acabó en una batalla campal. Ocho marines de la guardia galesa arrasaron la noche del sábado el restaurante argentino La Vaca Loca, en la localidad turística de Costa Teguise en las Islas Canarias, después de que el propietario del mismo los invitara a salir cuando advirtió que intentaban robarle una botella de vino.
"Cuando les dio la espalda se lanzaron contra él y lo machacaron", relató a El País una testigo, cuyo esposo permanece hospitalizado con la cara desfigurada por los golpes recibidos por los soldados británicos. "Actuaban con estrategia", describió la testigo: "Entre cuatro agarraban a un cliente, lo amasaban a golpes, lo tiraban al suelo y le machacaban la columna; eran máquinas de matar".
Tres se dieron a la fuga. Los otros cinco fueron detenidos por la Guardia Civil, a la que dieron golpes, dejaron llenos de escupitajos sus furgones y se burlaban de ellos diciéndoles que el cónsul los iba a sacar de inmediato. Volaron sillas, mesas, todas las lunas de cristal del restaurante, con los clientes dentro, ancianos y niños, presas del pánico. Un portavoz de la Guardia Civil confirmó que los cinco detenidos habían pasado ya a disposición judicial y añadió que al parecer son miembros de la guardia galesa. Además de los cuatro heridos que necesitaron atención hospitalaria, dos guardias sufrieron heridas leves.
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